Está muy correctamente que amemos a nuestros hermanos y nos preocupemos por ellos, pero nunca hasta tal punto de que nuestro seguimiento a Jesús dependa de nuestra relación con algún hermano. Puede aceptar en su correo electrónico de forma gratuita la Homilía dominical, y las reflexiones sobre el Evangelio de https://romaing581wsm9.thelateblog.com/profile